La historia de Dua Lipa está marcada por contrastes inesperados. Hija de un músico de rock kosovar, creció rodeada de acordes y ensayos familiares, aunque en su infancia recibió un revés que hoy resulta anecdótico: fue rechazada en el coro escolar porque su voz no encajaba con el registro buscado. Aquella negativa no la detuvo, sino que la impulsó a explorar su estilo propio, primero compartiendo canciones en internet y luego abriéndose camino en la industria musical.
Con el tiempo, esa decisión se transformó en una carrera meteórica. Actualmente supera los 66 millones de oyentes mensuales en Spotify y acumula más de 38 mil millones de reproducciones en la plataforma, cifras que la ubican en la cima del pop global. Su influencia no solo se mide en números: en 2020 fue reconocida por el Guinness World Records como la artista femenina con más oyentes mensuales en Spotify, un título que consolidó su impacto en la era del streaming.
A lo largo de su trayectoria ha publicado tres discos de estudio que redefinieron las pistas de baile en todo el mundo, con éxitos como New Rules, Don’t Start Now y Levitating. La crítica la ha destacado por su capacidad de unir pop, dance y nostalgia disco en un estilo propio que conecta con distintas generaciones.
El reconocimiento de la industria acompaña sus logros comerciales. Lipa suma tres premios Grammy, siete Brit Awards y más de 50 galardones internacionales, que incluyen distinciones por sus giras, videos musicales y colaboraciones. Además, su tercer álbum, Radical Optimism, lanzado en 2024, debutó en el número uno en varios países y consolidó su lugar como una de las voces más influyentes de la actualidad.
A los 30 años, Dua Lipa es sinónimo de perseverancia. Lo que comenzó con un rechazo escolar terminó en una carrera que combina récords globales, millones de seguidores y una identidad artística que la ubica entre las estrellas más importantes de la música contemporánea.