El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, encabezó este lunes 6 de octubre una protesta simbólica frente a la Casa Rosada, donde reclamó al Gobierno nacional la reactivación de las obras públicas paralizadas en su provincia.
Durante la manifestación, Sáenz criticó directamente al presidente Javier Milei:
“No quiero comer milanesas con Milei, quiero que se hagan las obras.”
El mandatario provincial estuvo acompañado por funcionarios, artistas y trabajadores de la construcción. Con ponchos salteños, guitarras y bombos, el reclamo buscó llamar la atención sobre la falta de fondos y la suspensión de proyectos de infraestructura claves para el norte argentino.
El acto se realizó en Plaza de Mayo, frente a la sede del Poder Ejecutivo, donde la Policía Federal limitó el despliegue del grupo a una intervención artística. El músico Facundo Saravia participó interpretando temas folclóricos junto a Sáenz.
En medio del reclamo, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se acercó a saludar al gobernador. Según explicó luego a los medios, había visto la protesta por televisión y consideró que “después de las elecciones será momento de trabajar en conjunto”.
El planteo de Sáenz se suma a las quejas de otros mandatarios provinciales por la paralización de obras y los retrasos en los pagos nacionales, una situación que, según los gobiernos locales, afecta la economía regional y la generación de empleo.